Los elegidos tenemos una cosa en contra y
otra a nuestro favor: La primera es que somos temporales, la segunda es que
somos temporales.
No, no se trata de un error lo señalado
anteriormente, dicho de otra forma, la temporalidad a la que estamos sujetos
tiene las dos acepciones señaladas anteriormente.
Primeramente, en cuanto a tener la
temporalidad en contra, esto es más que evidente en cuanto al desgaste y
ulterior muerte a la que estamos sujetos. ¿Quién no quisiera vivir
eternamente?, es por eso que en la mentira original el Enemigo esgrimió ese
argumento ante nuestros primeros padres: “Ciertamente no morirán”.
Pero, y aquí viene la otra parte, también eso
es una ventaja pues lo anteriormente señalado, si bien desgasta al hombre
exterior, permite al interior irse renovando: “Por tanto, no desmayamos; más
bien, aunque se va desgastando nuestro hombre exterior, el interior, sin
embargo, se va renovando de día en día”.
Esto último, podemos verlo en las nuevas
oportunidades que Dios nos concede cada día: “Por la misericordia de Jehová no
hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son
cada mañana; grande es tu fidelidad”.
Esas nuevas oportunidades nos permiten
aprender de nuestros errores y, con la ayuda del Espíritu de Dios, ir
desarrollando el carácter efecto y santo de nuestro Padre Dios: “Un día se lo
cuenta al otro día; una noche se lo enseña a la otra noche. Sin palabras, sin
sonidos, sin que se escuche una sola voz, su mensaje recorre toda la tierra y
llega al último rincón del mundo, en donde el sol pasa la noche”.
Ante esto, la mejor actitud que podemos tener
es la que el mismo Pablo tenía: “hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya
alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y
extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo
llamamiento de Dios en Cristo Jesús”, después de todo cada final es en realidad
un nuevo empezar.
Roberto
Celaya Figueroa, Sc.D.
Formación
• I+D+i • Consultoría
Desarrollo
Empresarial - Gestión Universitaria - Liderazgo Emprendedor
Referencias:
Génesis 3:4; 2 Corintios 11:3; 2 Corintios 4:16; Isaías
40:31; Lamentaciones 3:22-33; Salmos 103:10; Malaquías 3:6; Salmos 19:2-4;
Filipenses 3:13-14; Hebreos 6:1